El pueblo en la obscuridad que vio gran luz
- J. D. Amador Maldonado
- 21 dic 2014
- 1 Min. de lectura
El pueblo que andaba en tinieblas vio gran luz; los que moraban en tierra de sombra de muerte, luz resplandeció sobre ellos.
Isaías 9:2
Nosotros morábamos en sombra de muerte, es la realidad que no podemos ignorar.
Lo que Isaías escribe y que más adelante Mateo nos narra que tiene su cumplimiento en Jesús, es lo que nos revela el sentido del evangelio de Jesucristo.
Y esto nos enseña que el nacimiento de Jesús es el inicio del parteaguas de la historia de la humanidad, que llegaría a su punto más sublime en su muerte en la cruz.
Pero tanto en su ministerio, como en su muerte y en su resurrección, Jesucristo trae luz. Luz para quienes no conocen a Dios, y él viene para revelarnos como es él, conforme lo indica Juan 1:18.
Luz para quienes viven en oscuridad por estar muertos en pecado y se ofrece en sacrificio para darnos vida como lo dice Efesios 2:1-6.
Y luz para quienes habiendo nacido de nuevo necesitamos ser guiados hasta llegar a la meta, al ser transformados a su imagen y semejanza, como lo vemos en Romanos 8:29.
Por lo tanto Jesús trae luz a nuestras vidas al constituirse en Profeta, Sacerdote y Rey.
Y no debemos olvidarnos de algo muy importante: Esto ha sido iniciativa de Dios, el Dios que ha deseado revelarse a nosotros a través de su Hijo.
¡Qué a él sea toda la gloria desde ahora y para siempre!
Porque contigo está el manantial de la vida;
En tu luz veremos la luz
Salmo 36:9
Comments